miércoles, abril 27, 2005

Bienvenida

Cuatro las sílabas, como las casas de la sombra,
como los pies desnudos y las manos,
como los pasos antes del abismo
que dan los pájaros.

Un viejo se ha encontrado, justo ahora,
en el camino incierto de la niebla,
la carta que soñé en aquel instante.
El cielo no responde, como antes, a las propiciaciones,
pero al abrir el sobre
reaparece la voz y se adelanta
al vacío, que saluda.

para Akurion